De Cáceres a una casa de acogida en Madrid.
Jaime y Marian son dos madrileños que pasaban unos días de Navidad en un pueblo de Cáceres junto a sus dos hijos. El destino quiso que ellos se encontraran a Lila, una pequeña perrita que se cobijaba entre unas piedras y estaba tiritando de frío, tan solo era un cachorro. Sin dudarlo, la familia decidió darle cobijo y ponerla a salvo, pero no podían quedarse con ella, por eso, a su vuelta a Madrid, se pusieron en contacto con el Proyecto Salvando Peludos.
En el refugio, nada más llegar, recibió un tratamiento intensivo de Bayer para desparasitarla por completo. Una vez curada y en perfectas condiciones, se buscó para ella una casa de acogida. Ahora mismo crece sana y feliz en esta casa esperando la oportunidad de encontrar a alguien que le dé un hogar.
